Zócalo de la Ciudad de Puebla

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Lucha Libre

10 de enero de 2012

[Pertenecer]

Esos momentos en los que me doy cuenta que posición tengo en la vida son los más dolorosos para mi pensamiento, si veo lo que quiero ver no solo me hace más dependiente de ello; simplemente me hace sentir de otra manera a la cual no queria recalcar antes de ir a dormir.

Si veo tantas veces la luna y la inspiración llega de repente, las ganas que brotan en mi con tanta alegría son el reflejo de lo que puedo llegar a crear cada que veo letras y publicaciones diversas llenas de un interior que aún no conozco ni he tenido cerca como para poder sentirme parte suya.

Si cada humano se pone a pensar, escribir y plasmar todo lo que ha conocido y estará por conocer la vida sería algo más que maravilloso, algunas barreras se traspasarían y probablemente no habría tantas disputas y las riendas del amor andarían más sueltas que de costumbre.

He de admitir que nunca he amado, seguramente por alguien estaré esperando; las noches son solitarias y enteramente largas a lado de una almohada sin calor propio más que el que yo le he transmitido a lo largo de la madrugada donde planeo descansar mi pensamiento que prolifera, sueña y se invade de anomalias nunca antes programadas en mi corta vida.

Si supongo que las cosas pasarán como siempre he deseado la vida sería perfecta, no todos tenemos las mismas oportunidades, y siempre se ve en el reflejo de nuestras acciones como cuando tomamos decisiones; y he de culparme por sentirme insatisfecha de mi vida. A veces me dan ganas de matar y torturar a quien me quita el camino, sin embargo me he sentido conforme con lo que tengo y tienen aquellos que están cerca.

Si seguimos y seguimos escribiendo lo que pensamos, sin la necesidad de ganar dinero, el mundo sería grande y fantástico; sería probable que las artes fueran totalmente apreciadas y sin deterioros. Nos exigimos tanto que deterioramos la imagen del ser humano, nos hemos preocupado tanto por un estereotipo y una corriente que perdemos la esencia de nuestra persona y más de nuestra alma.

Cuando veo las generaciones y no me siento identificada lo más probable es que viva en el canal adecuado, no necesito a veces conocer tanto sino apreciar lo que me gusta. Si bien no he tenido la oportunidad de degustar las mieles del mundo, crearlas ha sido mi buena obra en beneficio.

Justifico mi poder ante la sociedad, más bien no pretendo mover masas. Quisiera que las cosas fueran más aptas y justas para todos, pues grandes mentes merecemos gigantes oportunidades, aquellas oportunidades que nos llevarán lejos y estarán empapadas del arte que hemos ido formando y repartiendo a lo largo de nuestra corta vida.

No más de 18 años son necesarios para mentes con grandes proyectos, sabemos que las cosas siguen su camino. Lo hermoso sería nunca rendirse ante las adversidades de la vida. Cuando es necesario saber lo que queremos bastará sumergirnos en nuestra conciencia y encontrar beneficios sobre todas las cosas que damos por conocidas.

La realidad es efímera, y lo que estamos por conocer estará en nuestra vida por el resto de la osadia, será grande aquel que sea visionario y nunca se rinda. Si el sistema te analiza y te exprime tus ganas estarán ahí para comenzar a defenderte.

ChelleLeon

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