Zócalo de la Ciudad de Puebla

Zócalo de la Ciudad de Puebla
Lucha Libre

25 de enero de 2021

[En poco tiempo no será más lo que es...]

Me parece que estoy pensando en ti de forma coherente, sin duda alguna cruzaste con alguna de mis manias. Y te sigo pensando de un forma dulce, leal, sincera y honesta. Si tu sintieras el cómo disfruto oirte hablar, verte caminar. Si tan solo entendieras que quiero estar para ti en el ahora. 

Nuestro tiempo está tomando forma, colores, texturas, sabores. Nuestros cuerpos se entrelazan en un sinfín de sinfonías y no sé si eres tan solo capaz de permitirte sentirlo. Hay dos pasados, el tuyo y el mío; del cual hemos aprendido que seguimos perdidos en esta falsedad que es amarse ante los ojos de otros.

Pero quiénes somos para ser tan tercos, quienes nos han enseñado que amar no era nuestro camino. Por qué nos hemos permitido tanto daño. Siendo tan elocuentes, tan vivos, tan humanos. Dejemos que los espacios donde nos encontramos se llenen de un resplandor verdadero, que podamos incluso mirar.

"De cada amor, heredamos gran cinismo. Lo notamos estando al borde del abismo. Abismo que cabamos con nuestros propios pies". Cartola tuvo razón; el mundo es un molino, tritura nuestros sueños tan mezquinos, y reduce nuestras ilusiones a polvo. 

Tengo miedo de tu dolor; si este fuera más fuerte y más profundo no te permitiría sentir. Me preocupa el mal momento por el que me pides un consejo o dejas que te escuche. Siento que podríamos tener miedo de hacerme sentir como un escape. O será solo un pensamiento mío. El pasado nos terminó moldeando hacia todos nuestros miedos. Y en el ahora, es difícil ignorarlo. 

A veces sueño con alguien como tú. Con algo como nosotros. Con retos, con pasiones. Con grandes momentos. Quisiera ser eso que buscabas en el pasado, sin defraudar cada una de tus gentilezas. Sintiendote a cada momento, tan cerca. Tan lleno de libertad. Jugando al amor entre dos almas que han vivido de manera similar. Lo quisiera todo de ambos.

Me queda esperar. Esperar que encuentres la paz que te mereces. Me queda respetarte. Me queda no juzgarte. Me queda disfrutar de algo que no tiene nombre ni corre en nigún sentido. Me queda que me anheles como algo tuyo. Me queda conectar con el alma que me he cruzado y es tan complementaria a la mia. Me quedas tú.

 
 
 Escrito por: Michelle De León

No hay comentarios.:

Publicar un comentario